18/11/08

LOS NIÑOS FUMIGADOS DE LA SOJA

Las Petacas, Santa Fe,

El viejo territorio de La Forestal, la empresa inglesa que arraso con el quebracho colorado, embolso millones de libras esterlinas en ganancias, convirtio bosques en desiertos, abandono decenas de pueblos en el agujero negro de la desocupacion y gozo de la complicidad de administraciones nacionales, provinciales y regionales durante mas de ochenta años.

Las Petacas se llama el exacto escenario del segundo estado argentino donde los pibes son
usados como señales para fumigar.

Chicos que seran rociados con herbicidas y pesticidas mientras trabajan como postes, como banderas humanas y luego seran reemplazados por otros.


'Primero se comienza a fumigar en las esquinas, lo que se llama 'esquinero'.

Despues, hay que contar 24 pasos hacia un costado desde el ultimo lugar donde paso el 'mosquito', desde el punto del medio de la maquina y pararse alli', dice uno de los pibes entre los catorce y dieciseis años de edad.

El 'mosquito' es una máquina que vuela bajo y 'riega' una nube de plaguicida.


Para que el conductor sepa donde tiene que fumigar, los productores agropecuarios de la zona encontraron una solucion economica: chicos de menos de 16 años, se paran con una bandera en el sitio a fumigar..

Los rocían con 'Randap' y a veces '2-4 D' (herbicidas usados sobre todo para cultivar soja). Tambien tiran insecticidas y mata yuyos.

Tienen un olor fuertisimo.

'A veces tambien ayudamos a cargar el tanque. Cuando hay viento en contra nos da la nube y nos moja toda la cara', describe el niño señal, el pibe que sera contaminado, el numero que apenas alguien tendra en cuenta para un modico presupuesto de inversiones en el norte santafesino.

No hay proteccion de ningun tipo.

Y cuando señalan el campo para que pase el mosquito cobran entre veinte y veinticinco centavos la hectarea y cincuenta centavos cuando el plaguicida se esparce desde un tractor que 'va más lerdo', dice uno de los chicos.

'Con el 'mosquito' hacen 100 o 150 hectareas por dia. Se trabaja con dos banderilleros, uno para la ida y otro para la vuelta. Trabajamos desde que sale el sol hasta la nochecita. A veces nos dan de comer ahi y otras nos traen a casa, depende del productor', agregan los entrevistados.

Uno de los chicos dice que sabe que esos liquidos le puede hacer mal: 'Que tengamos cancer', ejemplifica. 'Hace tres o cuatro años que trabajamos en esto. En los tiempos de calor hay que aguantarselo al rayo del sol y encima el olor de ese liquido te revienta la cabeza.

A veces me agarra dolor de cabeza en el medio del campo. Yo siempre llevo remera con cuello alto para taparme la cara y la cabeza', dicen las voces de los pibes envenenados.

-Nos buscan dos productores.

Cada uno tiene su gente, pero algunos no porque usan banderillero satelital.

Hacemos un descanso al mediodia y caminamos 200 hectareas por dia.

No nos cansamos mucho porque estamos acostumbrados.

A mí me dolía la cabeza y temblaba todo. Fui al medico y me dijo que era por el trabajo que hacia, que estaba enfermo por eso', remarcan los niños.

El padre de los pibes ya no puede acompañar a sus hijos. No soporta mas las hinchazones del estomago, conto. 'No tenemos otra opcion. Necesitamos hacer cualquier trabajo', dice el papa cuando intenta explicar por qué sus hijos se exponen a semejante asesinato en etapas.

La Agrupación de Vecinos Autoconvocados de Las Petacas y la Fundación para la Defensa del Ambiente habían emplazado al presidente comunal Miguel angel Battistelli para que elabore un programa de erradicacion de actividades contaminantes relacionadas con las explotaciones agropecuarias y el uso de agroquímicos.

No hubo avances.

Los pibes siguen de banderas.


Es en Las Petacas, norte profundo santafesino, donde todavía siguen vivas las garras de los continuadores de La Forestal.

Fuente: Diario La Capital, Rosario, Argentina


POR FAVOR PASALO

2 comentarios:

el Kontra dijo...

¡Que putada esta! Seguimos mal en latinoamérica, cosas así se deberían abordar también en la bronca entre el agro y el gobierno, pero pesa más la plata que la vida de estos pibes.

Anónimo dijo...

son los mismos pibes de los subtes? los qque tocan la caca antes de darte la mano, los mandan una vez qe no sirven mas como banderas